Estimados hermanos: Esta figura se diferencia de las demás, al igual que la décima, porque en ella aparecen palabras latinas en las figuras. Yo me inclino a interpretar que es así porque son descriptivas de los importantes resultados obtenidos en las láminas precedentes. Aquí un círculo que pudiera parecer la panza de un matraz, tiene en su parte superior algo similar a un tapón que recuerda al «luten de sapiencia» y sobre él están escritas las palabras «sigilum hermetis». Por detrás hay una figura con los atributos de la Justicia, la cual mientras mantiene el equilibrio perfecto de las proporciones, parece observar el matraz. La imagen se puede mirar desde diversos ángulos. Podéis imaginar que el tapón forma una cruz con los brazos de la figura creándose así el conocido símbolo alquímico de la Tierra. También podéis poner la lamina boca abajo y entonces los pies de la figura dan la sensación de corresponder a un semicírculo y en conjunto se apreciaría el símbolo del Mercurio. Alrededor del cuadrado de la sal aparecen las estaciones, con la primavera del lado de la espada que recuerda a Marte, regente de Aries, que es el signo zodiacal donde se localiza el punto vernal que marca el equinoccio de primavera y la balanza en el lado del otoño relacionándose con el signo de Libra y el equinoccio de esta estación. Estas mareas planetarias son de la mayor importancia en la vía que nos ocupa. El círculo encerraría la tierra o caos inicial de los sabios, que por las operaciones descritas se ha purificado, llegando al grado de armonización de la quintaesencia. Esta se manifiesta en la vía seca como una sal que es el «vaso de la Naturaleza» porque se convierte en la morada en la que vive un principio mineral justamente armonizado, acuoso e ígneo, simbolizado por el triángulo del fuego con el agua en su interior. Personalmente me gusta llamar a esta sal, parecida en transparencia y color a una amatista, «Jacinto de Compostela», lo cual es bastante sugerente sobre su aspecto y origen.